lunes, 1 de septiembre de 2025

LA PICEA PARA BONSAI





Pícea
(Picea ssp.)
Otros nombres: picea, abeto rojo, pinabete, pino abeto, abeto falso, no confundir con el género Abies.

El género Picea, como los pinos (Pinus), los cedros (Cedrus) o los abetos (Abies), pertenece a la familia de las Pináceas (Pinaceae, en latín) y está compuesto por unas 40 especies, con numerosas variedades y cultivares, algunas de ellas enanas. Presumiblemente los árboles del género Picea aparecieron al comienzo del Cretácico (Era Secundaria), en pleno auge de los dinosaurios, hace más de 100 millones de años, justamente cuando se produjo una revolución en las plantas, y que fue cuando aparecieron las primeras plantas con flores y árboles con hojas.

La mayoría de las especies de este género son originarias de China y su hábitat natural son la regiones de montaña del Hemisferio Norte (América, Europa, China y Japón), formando parte de los límites de la vegetación en altura de las montañas (hasta los 2.000 metros) y en bajas temperaturas (hacia el polo). En Europa la pícea común, abeto rojo o pícea de Noruega (Picea abies (L.) Karst. = P. excelsa (Lam.) Link.) es la especie arbórea más importante por la superficie que ocupa y volumen de los productos que se obtienen de ella.

Las píceas son muy similares a los abetos, tanto es así, que muchos de los nombres comunes que se refieren a las píceas lo hacen con el nombre de abeto, pero no hay que confundir a las píceas con los abetos porque son géneros diferentes que se diferencian principalmente en:

Pícea 

Hojas
  
Nacen de un "acerico" de la rama, que es una especie de "cuña" leñosa o asiento en el que se engarzan y son más cortas que las del abeto.

Abeto 

 
Nacen directamente sobre la rama, sin asiento, y son más aplanadas y largas que las de la pícea.

Pícea
 
Piñas 
  
Son colgantes, es decir, cuelgan de las ramas.

Abeto 

  
Son erectas, es decir, nacen hacia arriba, sin colgar.

Además, las píceas son más resistentes a la sequía y el frío que los abetos. 
No obstante, en la naturaleza suelen estar asociados en los mismos bosques y ecosistemas, algo que seguramente contribuye a confundir a la gente.

Las principales características del género Picea son:



- árbol perennifolio, de crecimiento simétrico coniforme o piramidal, con ápice puntiagudo, de aspecto similar al de un abeto, de 20 a 60 metros de altura, aunque algunas especies y variedades no llegan a medir más de 2 ó 3 metros y algunas son incluso enanas. 
En general, su longevidad no supera los 200-300 años, pero algunas especies pueden producir ejemplares que pueden llegar a los 400-700 años.

- Tronco recto, con ramificación regular, de corteza escamosa, lisa, rugosa o agrietada (dependiendo de la edad y especie), de color gris, marrón oscura o rojizo (dependiendo de la especie), que puede llegar a medir desde 30 cm. hasta 2 metros de diámetro.

- Hojas pequeñas, denominadas acículas, de 3 a 20 mm. de longitud (dependiendo de la especie), aisladas, tetragonales o planas, puntiagudas, rígidas, de color verde vivo, de claro a oscuro (dependiendo de la especie), formando un follaje denso o muy denso y apretado, que nacen alrededor de las ramas engarzadas en un asiento o acerico y permanecen en ellas hasta 4 años.

- Flores a mediados de la primavera, de distinto sexo en el mismo árbol (monoicas). 
Masculinas en las axilas con estambres en espiral, de aproximadamente 1 cm. y color amarillento; y femeninas, solitarias, de color rojo oscuro, situadas en ápice de los brotes.

- Semillas de color pardo marrón, con un ala lateral que le permite ser transportada por el viento y que están contenidas en el interior de un fruto, denominado cono o piña, llamado científicamente estróbilo, de 3 a 18 cm. (dependiendo de la especie), elipsoide, oblongo o esférico, penduculado, subleñoso, con escamas, de color verde al principio (en otoño) y que cambia a pardo cuando madura al un año y se abre al madurar, pero sin deshacerse. 
En el caso de la pícea común, abeto rojo o pícea de Noruega (Picea abies (L.) Karst. = P. excelsa (Lam.) Link., el árbol fructifica a los 50 años y sólo lo hace cada 2-8 años.

Algunas de las especies de este género son:


- Abeto blanco occidental, pícea blanca, pícea alba, pícea blanca del Canadá o pícea glauca (Picea glauca (Moench) Voss = Picea albertiana auct. = Pinus glauca Moench)

- Abeto rojo, pícea común, pino abeto, pinabete, árbol de Navidad o pícea de Noruega (Picea abies (L.) H. Karst. = P. excelsa (Lam.) Link. = Pinus abies L.)

- Abeto Engelmann o pícea de Engelmann (Picea engelmannii Parry ex Engelm.)

- Abeto plateado, abeto de las marismas, abeto Menzies, abeto de la costa, abeto amarillo, abeto sitka, picea sitka o pícea sitka canadiense (Picea sitchensis (Bong.) Carriére = Picea falcata (Rafinesque) Suringar = Picea menziesii (Douglas ex D. Don) Carriére = Abies falcata Rafinesque = Abies menziessi (Douglas ex D. Don) Lindley = Pinus sitchensis Bong. = Pinus menziesii Douglas ex D. Don)


- Pícea de Alcock, pícea japonesa bicolor o pícea bicolor (Picea alcoquiana)


- Picea alpestris.


- Pícea de Asia Menor o pícea oriental (Picea orientalis (L.) Link = Pinus orientalis L.)


- Pícea azul, pícea del Colorado, pícea punzante o pícea pinchuda (Picea pungens Engelm.)


- Picea balfouriana - Pícea bicolor (Picea alcockiana) - Pícea de Brewer, pícea breweriana o pícea llorona (Picea breweriana S. Watson) - Picea chihuahuana - Pícea de conos púrpura (Picea purpurea = Picea likiangensis (Franchet) Pritzel var. purpurea).


- Pícea del dragón, pícea china o pícea de la China occidental (Picea asperata) - Picea farreri


- Pícea del Himalaya, pícea de Afganistán o pícea de Smith (Picea smithiana (Wall.) Boiss. = Picea morinda = Pinus smithiana Wall.) - Pícea de Hondo (Picea jezoensis (Siebold & Zucc.) Carriére subsp. hondoensis = Picea ajanensis)

- Pícea japonesa de Torano o pícea cola de tigre (Picea polita (Siebold & Zucc.) Carriére = Picea torano)
- Picea koraiensis - Pícea de Koyama (Picea koyamae = Picea koyamai)


- Pícea de Likiang (Picea likiangensis (Franchet) Pritzel)

- Picea martinezii


- Pícea de Maximowicz (Picea maximowiczii)


- Picea meyeri


- Picea morrisonicola Hayata


- Pícea negra, pícea negra norteamericana o pícea mariana (Picea mariana (Mill.) B.S.P. = Abies mariana (Mill.))


- Picea neoveitchii


- Pícea roja o pícea roja del Canadá (Picea rubens Sarg.)
- Pícea de Sajalín (Picea glehnii (F. Schmidt) Mast.)

- Pícea de Sargent (Picea brachytyla)

- Pícea de Schrenk (Picea schrenkiana)

- Pícea de Serbia o pícea omorica (Picea omorika (Pancic) Purk = 
Picea omorica (Pancic) Purk = Pinus omorika Pancic)

- Pícea siberiana (Picea obovata)

- Pícea de Sikkim (Picea spinulosa = Picea morindoides)

- Pícea de Wilson (Picea wilsonii = Picea watsoniana)

- Pícea yatsubusa (Picea jezoensis (Siebold & Zucc.) Carriére var. yatsubusa)

- Pícea yeddo, pícea de Edo, pícea de Ezo (*) (Picea jezoensis (Siebold & Zucc.) Carriére)

(*) Ezo es el antiguo nombre de la ciudad de Hokkaido (Japón).


Como sucede con la mayoría de las Pináceas, el género Picea es uno de los más conocidos, empleados y apreciados por los aficionados y profesionales del bonsai, debido a su belleza, el pequeño tamaño de sus acículas y por ser perennifolio, lo que nos permite disfrutar del color verde de su copa durante todo el año. 

Además resiste bastante bien los trasplantes y las podas, lo que lo hace especialmente indicado para principiantes. 
Es ideal para bonsais de un tamaño pequeño/mediano y para la composición de bosques.

Obviamente las especies preferidas para el modelado de bonsai son las enanas. 
En occidente suele emplearse preferentemente el abeto rojo o pícea de Noruega (Picea abies (L.) Karst.), también conocido como pícea común, mientras que en Japón se utilizan la Picea glehnii (F. Schmidt) Mast. y la yeddo o pícea de Edo (Picea jezoensis (Siebold & Zucc.) Carriére).

Situación


Debe cultivarse en el exterior durante todo el año, a pleno sol, pero con una temperatura ambiente fresca, controlando adecuadamente el riego, ya que así conseguiremos un crecimiento sano, con una ramificación mucho mayor y frondosa. Durante los días más calurosos del verano y horas centrales del día, la protegeremos un poco con algo de semisombra.

La pícea necesita sentir el frío y el paso del invierno con un descenso de temperaturas para que la llegada de la primavera le provoque el despertar de las yemas en reposo.

El cultivo exterior durante todo el año, además de garantizar su correcto cultivo, nos ayudará a reducir el tamaño de sus hojas.

Una vez encontrado su emplazamiento más adecuado, no conviene moverla de sitio porque se resiente con los traslados, sobre todo si son frecuentes.

Riego / Abono



Los riegos deben ser cada vez que se seque la superficie de la tierra, haciéndolo a fondo, es decir, hasta que salga abundante agua por los agujeros de drenaje, pero evitando tanto el encharcamiento permanente de la tierra, para evitar un exceso de humedad que pudra sus raíces, como dejar totalmente seca la tierra.

En cualquier caso, no le gusta nada el suelo seco y la debilita bastante e incluso un corto período de sequía es suficiente para debilitarla en exceso y perder parte de sus hojas, lo que ocasiona cierta dificultad de cultivo en los climas (o situaciones) demasiado secos y calurosos, especialmente durante la sequedad estival.

Conviene utilizar una regadera con agujeros lo más finos posible para que el agua penetre mejor en la tierra y lo haga con suavidad. (comprar regadera)



No hay que pulverizar las hojas ni mantener ambientes excesivamente húmedos de forma artificial porque correremos el riesgo de que aparezcan hongos.

Abonar con frecuencia con un abono orgánico de calidad, especialmente durante la época de crecimiento vigoroso, es decir, en primavera y también durante el otoño. 
Durante el invierno y la época más calurosa del verano debe reducirse la cantidad de abono porque son épocas con escaso o nulo crecimiento.

Podemos ayudar a reducir el tamaño de las hojas, además de con una buena exposición exterior a pleno sol con el suministro de abonos más ricos en fósforo (P) y potasio (K) que en nitrógeno (N) para no fomentar el desarrollo de sus hojas, además así fomentamos la fructificación.

Trasplante


Debe trasplantarse cada 2 ó 3 años al comienzo de la primavera, justo un poco antes de que comience la brotación del año, cuando los brotes están hinchados pero aún sin abrir. 
Los ejemplares más viejos y ya formados pueden trasplantarse con menor frecuencia, cada 4 ó 5 años.

Durante el trasplante conviene sanear bien cualquier parte de raíces podridas y podar las ramas no deseadas para reducir su copa. 
No conviene podar demasiadas raíces, pero si la poda de raíces es muy fuerte, convendría quitar hojas en la misma proporción que las raíces eliminadas. 
En caso de duda sobre la cantidad de raíces que tienes que podar, un truco seguro para no dañar el árbol es dejar 1/3 más volumen de raíces que de parte aérea (copa), aunque siempre es preferible preguntar a un experto, a otro aficionado o simplemente no podar ninguna raíz hasta que no estés seguro. 

Evita que se sequen las raíces en contacto con el aire durante el tiempo que dure el trasplante, evitando podar raíces a pleno sol o en un lugar con viento o corrientes de aire.

No es obligatorio, pero si utilizamos hormonas de enraizamiento con fungicida facilitaremos el éxito del trasplante al estimular el desarrollo de las raíces. 
Debes ser lo más rápido posible durante el trasplante y evitar que las raíces se sequen por estar demasiado tiempo en contacto con el aire.

Una buena mezcla de sustrato para una pícea podría ser una mezcla de tierra con un 30% de arena de grano grueso o material equivalente (tierra volcánica, etc.), 10% de turba y 60% de mantillo.

No hay que olvidar que la tierra utilizada debe ser siempre nueva y limpia y nunca reutilizada de otros cultivos para así evitar contaminaciones (hongos, enfermedades, plagas, etc.) que hubieran podido afectar a otros árboles.

Macetas sin esmaltar, de colores oscuros y con formas rectangulares y planos, además de lajas de pizarra pueden ser una decisión acertada.

Es conveniente proteger el árbol después del trasplante durante un par de meses, situándolo en un lugar muy bien iluminado pero evitando la exposición directa al sol.

Poda / Pinzado


La época más adecuada para la poda de ramas es entre el final del otoño y el invierno, pero es bastante resistente a la poda y prácticamente se puede podar durante todo el año.

La forma de emplear la poda como técnica de modelado es dejar crecer las ramas y podar en función de la dirección deseada. Debes fijarte en la dirección que te interesa para la nueva rama (izquierda o derecha) y eliminar el brote no deseado. 
Esta técnica te permitirá un aumento de la ramificación en la dirección elegida.

Las píceas son coníferas que cicatrizan bastante bien y admiten la sustitución de ápices y el acortamiento de su tronco mediante la creación de un jin en su ápice original (extremo final del tronco), lo que además les imprime un carácter de vejez adicional que aumenta su belleza.

Los pinzados deben realizarse durante la época de máximo vigor, cuando los brotes nuevos aún están tiernos y han crecido poco, cuando apenas se abran, con un aspecto que asemeja a la cola de un zorro o un pincel. 
La forma adecuada de pinzar una pícea es despuntar sus brotes sujetando con una mano la masa verde que vamos a pinzar y arrancando los brotes tirando con los dedos o con pinzas, pero nunca cortando con tijeras u otras herramientas, haciéndolo de 1/3 a 2/3. Hay que tener cuidado de no pinzar muy pronto para evitar que los entrenudos se alarguen demasiado, pero sin esperar tanto que los nuevos brotes hayan madurando tanto que ya no se puedan pinzar con los dedos.

Si pinzamos los nuevos brotes, especialmente en las zonas más congestionadas y dejando sólo los que vayamos a necesitar para su modelado, conseguiremos árboles más ramificados y compactos, con hojas aún más pequeñas.

Las píceas suelen modelarse en los estilos: moyogui o recto informal, chokkan o recto formal, shakan o inclinado, o yose-ue o bosque, aunque todo depende de tu imaginación y gustos.

Conviene eliminar las hojas, flores y frutos marchitos para evitar la aparición de hongos y las ramas no deseadas o secas pueden eliminarse en cualquier momento.

Nunca hay que podar drásticamente, si el árbol no está sano y vigoroso.

Además de podar para modelar, hay que podar para conseguir una estructura que permita la llegada de la luz a todas las ramas y las todas hojas puedan realizar la fotosíntesis.

Hay que tener cuidado de no podar drásticamente las raíces durante el trasplante, podando sólo las raíces más gruesas y dejando las más finas. 
También hay que aprovechar a podar las ramas no deseadas. En caso de duda sobre la cantidad de raíces que tienes que podar, un truco seguro para no dañar el árbol es dejar 1/3 más volumen de raíces que de parte aérea (copa), aunque siempre es preferible preguntar a un experto, a otro aficionado o simplemente no podar ninguna raíz hasta que no estés seguro.

Las podas fuertes de raíces deben realizarse en el momento de los primeros trasplantes, con una poda equivalente de ramas.

Entre la poda de ramas y el trasplante (o viceversa) debería existir un intervalo mínimo de tiempo para no acumular demasiadas operaciones agresivas a la vez, por ejemplo, 3 semanas.

Por último, recordar que la poda o el pinzado sólo se deben realizar si el árbol está sano.


Alambrado


El alambrado de las píceas puede realizarse durante todo el año, pero es preferible realizarlo durante el otoño, el invierno o la primavera, preferiblemente después de una poda, y sólo en árboles sanos. 
Aunque sus ramas son relativamente flexibles, conviene tener cuidado con la corteza del tronco y ramas. 
Es posible que necesites alambrar en más de una ocasión hasta que sus ramas más gruesas queden en la posición deseada.

Debes vigilar las marcas del alambre en la corteza debido a la rapidez con la que engordan y crecen, generalmente el alambre deberá retirarse en el momento en que vaya a comenzar la aparición de marcas en la corteza. 
Es recomendable no regar el día anterior al alambrado.

Enfermedades y plagas más frecuentes

Las píceas suelen ser bastante resistentes a las plagas y enfermedades, pero en cualquier caso, algunas de las enfermedades o plagas que pueden atacarle son:

- Araña roja: ataca sobre todo en ambientes mal ventilados o de interior con ambiente seco y caluroso, lo que provoca un debilitamiento progresivo. 
Son inconfundibles sus manchas blancas sobre las hojas (debido a las picaduras) y los hilillos de telitas de araña sobre las que camina la araña roja.

- Hongos: debido a un exceso de riego o humedad. Generalmente roya, podredumbre, armilaria de color miel, etc.

- Pulgón de la pícea: como la cochinilla, es un insecto chupador de savia, generalmente de color oscuro (marrón o negro), de unos 3 mm. de longitud y agrupado sobre los brotes tiernos y en colonias densas protegidas por hormigas que recogen el rocío meloso que secretan éstos. 
Generalmente se debe al Adelges abietis o al Elatobium abietinum.

Por último recordar que los tratamientos deben ser específicos contra la plaga o enfermedad y constantes en el tiempo hasta eliminarla completamente y que el cultivo adecuado de nuestro árbol nos evitará tener que usar productos químicos que provocan:

Reproducción

Es un árbol que se reproduce con relativa facilidad a partir de:

- acodos aéreos.

- esquejes: de ejemplares jóvenes (de menos de 5-6 años), ya que los ejemplares más viejos tienen menos posibilidades de enraizar. 
Hay que coger trozos semimaduros del año que aún no estén leñosos, de unos 20 cm. de longitud, preferentemente a mediados del verano o finales del invierno (en este caso hay que usar algo de calor de fondo: 15-20ºC). E
stos esquejes, una vez que han enraizado, hay que dejarlos crecer, al menos durante un año, antes de comenzar a modelarlos como bonsai para asegurar el éxito del esqueje. 
La especies enanas enraízan mejor.

- semillas: recogerlas durante el invierno cuando los frutos están maduros para que las semillas sean frescas y viables. 
Las piñas deben abrirse con algo de calor y se pueden conservar en un lugar fresco hasta la primavera, por ejemplo, en la heladera. 
Sembrar después de haberlas estratificado, al menos, 3 semanas. Las plántulas deberían trasplantarse al alcanzar los 5 cm. de altura.

Tanto los acodos como los esquejes pueden tardar hasta 2 años en enraizar.

Curiosidades

La pícea (Picea ssp.) debe su nombre vocablo latino "piceus" = de pez, negro como la pez, y a su vez del griego "píssa" = pez, resina, término que derivó en otro latino con el que los romanos denominaban a la pez o brea del pino como "pix" y al pino de la que se obtenía. 

Según Plinio la pícea era la fuente principal de pez (resina) en la antigüedad.


Como ya hemos dicho al comienzo, no es lo mismo un abeto (Abies) que una pícea (Picea), pero la confusión popular existente entre abetos y píceas aumentó aún más cuando Linneo consideró al abeto común y la pícea común o abeto rojo como especies de pinos del género Pinus y denominó erróneamente al abeto común Pinus picea y a la pícea común Pinus abies, motivo por el que en la actualidad, y una vez corregido el error de clasificación, a la pícea común o abeto rojo se la denomina como Picea abies.

"Abies" era el nombre latín del abeto y su madera (en latín vulgar, abetum), que procedía a su vez del griego "ábin", aunque otros autores lo relacionan con el griego "abios" = larga vida. 

Es posible que la raíz griega proceda del indoeuropeo "ab" = agua o líquido, en referencia, tal vez, al líquido resinoso que fluía de sus heridas.

Aún hoy en día, la confusión es tal, que:

- la pícea común, abeto rojo o pícea de Noruega (Picea abies (L.) Karst.) se vende como árbol de Navidad pensando que es un abeto.

- incluso en el libro "Árboles singulares de la Comunidad de Madrid", aunque hacen la aclaración de la diferencia existente entre el género de los abetos (Abies) y otros géneros, sorprende que en el índice no incluyan un capítulo específico para las píceas, siguiendo un criterio botánico, y las incluyendo en el capítulo de los abetos, de acuerdo al criterio popular. Concretamente lo hacen con una pícea del Himalaya (Picea smithiana (Wall.) Boiss. = Pinus smithiana Wall.) y con una pícea común o abeto rojo (Picea abies (L.) H. Karst.), son incluidas en el capítulo sobre abetos.

La pícea común o abeto rojo (Picea abies (L.) H. Karst.) tiene numerosas leyendas en Europa y durante la antigüedad fue considerada en muchos lugares como símbolo de la vida eterna, creyendo que el demonio huía de este árbol, por lo que es posible encontrarlo en muchos pueblos juntos a sus iglesias.


Su madera es de excelente calidad, incluso mejor que la del abeto (Abies), y se emplea en la fabricación de celulosa, construcción de barcos, remos, hélices de aviones, carpintería, ebanistería, construcción de encofrados y cajas de resonancia para instrumentos musicales de cuerda (pianos, violines, etc.), por ejemplo, para la fabricación de los famosos violines Stradivarius. Esto se debe a que en las máximas altitudes de las montañas algunas píceas crecen muy lentamente, sólo 2 ó 3 cm. cada 10 años !!, lo que produce la "madera de resonancia", que es una madera que tiene los anillos muy próximos, con un grano muy fino, debido a su lento crecimiento.

Antes de inventar la fabricación de la goma de mascar o chicle, de alguna píceas, como de la pícea roja (Picea rubens) se obtenía una resina llamada "goma picea" que se consumía para mascar y a la que se atribuían propiedades medicinales.

En Madrid, en la plaza de Murillo, entre la entrada al Jardín Botánico y una de las entradas al Museo del Prado, existe un ejemplar de pícea del Himalaya (Picea smithiana (Wall.) Boiss. = Pinus smithiana Wall.), también denominada pícea de Afganistán o pícea de Smith, procedente de una de las primeras plantaciones de finales del siglo XVIII, con 22 metros de altura, 3,80 metros de base en el tronco, 9,5 metros de diámetro de copa y unos 200 años de antigüedad.



En el Carmanah Pacific Provincial Park del valle de Carmanah, en la isla de Vancouver (Canadá), existe una pícea sitka (Picea sitchensis (Bong.) Carriére = Pinus sitchensis Bong.), llamado Carmanah Giant (el gigante de Carmanah), con más de 96 metros de altura y unos 400 años.

Fernando Gatto

lunes, 18 de agosto de 2025

EL ACODO AÉREO



Acodo aéreo

Los métodos para propagar plantas son:

› Semillas
› Esquejes
› Acodos
› Injertos
› División de mata
› Bulbos, cormos, tubérculos y rizomas
› Hijuelos
› Estolones
› Cultivo in vitro

Vemos que el ACODO es uno de los métodos de multiplicación de plantas.

A su vez, hay varios tipos de acodos:

• Acodo simple
• Acodo múltiple
• Acodo aéreo
• Acodo en montículo
• Acodo en trinchera
• Acodo de punta

En este artículo estudiaremos el ACODO AÉREO, el más usado junto al acodo simple.


Acodo aéreo

1. ¿En qué consiste el ACODO AÉREO?

Hacer que un tallo o rama desarrolle raíces sin tener que separarlo de la planta madre. Una vez que la rama ha echado raíces, se corta por debajo de ese punto, se planta y ya tenemos una nueva planta independiente e idéntica a la madre (un clon).

El acodo aéreo se basa en la capacidad que tienen muchas plantas de emitir raíces desde cualquier rama o tallo si se dan las condiciones adecuadas para ello.

Se puede acodar a la vez hasta el 70% de la copa de una planta ó árbol.





2. ¿Qué especies se pueden multiplicar por ACODO AÉREO?

Sobre todo árboles, pero también muchos arbustos, trepadoras y plantas de interior. 
Esos son algunos ejemplos:

Árboles

• Abedul (Betula pendula)

• Acacia (Acacia retinodes)• Acebuche (Olea europaea var. sylvestris)

• Almez (Celtis australis)

• Árbol de Júpiter (Lagerstroemia indica)

• Árbol de las Tulipas, Tulípero de Virginia (Liriodendron tulipifera)

• Árbol del amor, Cercis (Cercis siliquastrum)

• Árbol del caucho (Ficus elastica)

• Árbol del paraíso (Eleagnus angustifolia)

• Arce campestre (Acer campestre)

• Arce o Arce negundo (Acer negundo 'Albomargitum' y 'Aureomargitum')

• Arizónica, Ciprés de Arizona (Cupressus glabra var. conica)

• Aromo (Acacia farnesiana)

• Bellasombra, Ombú (Phytolacca dioica)

• Carpe (Carpinus betulus)

• Castaño (Castanea sativa)


• Catalpa (Catalpa bignonioides)

• Cerezo (Prunus avium)

• Chopo boleana (Populus alba 'Bolleana')

• Ciprés horizontal (Cupressus sempervirens var. horizontalis)

• Ciruelo rojo, Prunus pisardi (Prunus cerasifera 'Atropurpurea')

• Cóculo (Cocculus laurifolius)

• Cornicabra, Terebinto (Pistacia terebinthus)

• Criptomeria, Cedro del Japón (Cryptomeria japonica)

• Enebro (Juniperus communis)

• Espino albar, Majuelo (Crataegus monogyna)

• Espino blanco (Crataegus laevigata)

• Falsa acacia (Robinia pseudoacacia)

• Ficus australiano (Ficus macrophylla)

• Ficus benjamina (Ficus benjamina)

• Ficus herrumbroso (Ficus rubiginosa)

• Ficus lira (Ficus lyrata)

• Fotinia (Photinia serratifolia)

• Granado (Punica granatum)

• Guayabo del Brasil (Feijoa sellowiana)

• Haya (Fagus sylvatica)

• Higuera (Ficus carica)

• Jabonero de la China (Koelreuteria panniculata)

• Laurel de indias, Ficus nítida (Ficus microcarpa = Ficus retusa)

• Laurel (Laurus nobilis)

• Liquidambar (Liquidambar styraciflua)

• Macrocarpa, Ciprés de Monterrey (Cupressus macrocarpa var. lutea)

• Madroño (Arbutus unedo)

• Magnolio (Magnolia grandiflora 'Gallisoniensis')

• Mango (Mangifera indica)

• Membrillero (Cydonia oblonga)

• Mimosa (Acacia dealbata)

• Moral (Morus nigra)

• Morera blanca (Morus alba)

• Morera de papel (Broussonetia papyrifera)

• Olivo (Olea europaea)

• Olmo del Caúcaso (Zelkova carpinifolia)

• Palosanto, Kaki (Diospyros kaki)

• Peral (Pyrus communis)

• Plátano de Oriente (Platanus orientalis)

• Plátano de sombra (Platanus x hispanica)

• Roble australiano, Grevilea (Grevillea robusta)

• Sauce blanco (Salix alba)

• Secuoya gigante (Sequoiadendron giganteum)

• Secuoya (Sequoia sempervirens)

• Sófora, Acacia del Japón (Sophora japonica)

• Tejo (Taxus baccata)

• Tuya gigante (Thuya plicata)

• Tuya occidental (Thuya occidentalis)

Arbustos y Trepadoras

- Acebo
- Azalea
- Camelia
- Drago
- Glicinia (trepadora)
- Hamamelis
- Magnolia soulangiana
- Mirto
- Hibiscus rosa-sinensis
- Lilo
- Pitosporo
- Rododendro...

Plantas de Interior

- Yucas
- Drácenas
- Tronco del Brasil
- Ficus...


Acodo aéreo

3. Época del año para hacer el ACODO AÉREO

La mejor época será la primavera. La ramita enraizada se sacará en otoño o en la primavera siguiente, antes de que se inicie el nuevo crecimiento.

En climas cálidos, por ejemplo, de tipo Mediterráneo, también se pueden hacer acodos al inicio del otoño y separar el acodo en la primavera.

No se debe hacer en pleno verano ni en invierno, al ser períodos de inactividad. Lo más importante para tener éxito con los acodos es hacerlos con la planta en plena actividad, circulando savia.

Las Plantas de Interior en un ambiente templado, o en invernaderos, pueden acodarse casi en cualquier época del año.

4. ¿Cómo se hace un ACODO AÉREO?


Anillo en una corteza etiolada
Acodo atado


Inyectando agua al inicio. 
Envoltura de periódico


Ya ha echado raíces. 
Plantas extraídas


Plantación

Imágenes por cortesía de: Jardín Botánico Mundani https://www.jardin-mundani.com

1. Selecciona una buena rama ó tallo. 
Por ejemplo, una que si desapareciese de la planta no afectaría a su aspecto estético.

2. Haz un anillo de corteza a unos 30 cm. de la punta de la rama, por ejemplo, o a más distancia.

3. Efectúa con un cuchillo dos cortes paralelos separados 1 centímetro (en Ficus vale 3 cm.) y extrae con cuidado la corteza de entre los dos cortes.

4. A la zona anillada aplícale polvo de hormonas de enraizamiento. 
Esto NO es imprescindible, pero ayuda bastante a la emisión de raíces.

5. Seguidamente, coge un trozo de plástico transparente, rodea con él la ramita y ata con una cuerda en su parte inferior, quedando como un cucurucho. 
Es mejor usar un plástico transparente que un plástico negro, con el fin de que se pueda ver si aparecen raíces sin necesidad de abrir el plástico.

6. Rellena este cucurucho de plástico con unos puñados de turba rubia (tipo musgo, esfagno, Sphagnum) o de turba negra. 
La turba rubia es preferible a la turba negra porque posee una mayor porosidad que proporciona más aireación a las raíces.

7. Ata fuertemente con una cuerda, para que la turba o esfagno contacten perfectamente con el anillo de la corteza. 

8. A continuación, inyecta agua con una jeringuilla para humedecer la turba o esfagno.

9. Por último, cubre todo con papel de periódico o papel de aluminio, quedando así aislado del sol y de la luz. 
En un acodado resulta fundamental que no entre luz en las partes en las que se desea que se formen raíces.

10. La turba deberás mantenerla húmeda durante todo el proceso, pero no demasiado mojada. 
Para ello, cada 15 ó 20 días introduce agua usando una jeringuilla. 
El método de la jeringa es mejor que andar desatando el acodo para verter el agua.

11. Pasados los 2 primeros meses, ve destapando el papel cada 15 días para mirar cómo va el enraizamiento. 
Tendrás que esperar hasta observar una buena cantidad de raíces blancas a través del plástico.

12. El tiempo de separación del acodo varía según la especie y las condiciones.

En algunas plantas el enraizado se efectúa en 2 ó 3 meses, o menos, como los Ficus.

La Higuera acodada al principio de la primavera, generalmente estará bien enraizada para mediados de verano. 
Si el acodo se hace en otoño, es posible que para la primavera siguiente se haya desarrollado un sistema radical suficientemente grande.

El Cerezo suelen bastar unos 3 meses para que tengan unas buenas raíces.

Las Camelias de 4 a 6 meses en climas templados.

Magnolia necesitará otro año más sin separarlo de la planta ya que el enraizamiento es más lento, igual que el Acebo, Lilo, Azalea...

13. En cuanto las raíces rodeen el plástico por dentro, es el momento de separar el acodo de la planta madre con un corte limpio justo por debajo de las raíces.

14. Retira con cuidado el plástico sin que se desmorone el cepellón de turba y raíces y planta en una maceta.

15. Se debe ubicar en un lugar fresco, húmedo y con luz pero sin sol. Ya tenemos una nueva planta.

Tres consejos adicionales para tener más posibilidades de éxito:

Etiolización


Cinta opaca. Tras retirar la cinta opaca

• La etiolización consiste en cubrir con una cinta opaca el trozo de corteza de la ramita que queremos acodar. 
Manteniéndolo así un tiempo se transforma en algo parecido a una raíz. 
Cuando pase un cierto tiempo se retira la cinta y se extrae el anillo de corteza de esa zona.

• Una rama etiolada emite raíces con facilidad, por lo que aumentarán las probabilidades de éxito del acodo.

• La etiolización está especialmente indicada para árboles de difícil enraizamiento.

• La cinta opaca se puede poner en cualquier época del año, por ejemplo, un año antes de hacer el anillado para el acodo, o no, con ponerla un par de meses antes ya vale, sobretodo en árboles y arbustos de crecimiento rápido, como los Ficus.

• Insisto que no es imprescindible poner la cinta opaca cada vez que se vaya a hacer un acodo, se puede hacer directamente sobre una corteza normal sin "etiolarla".

Vitamina B1

• Si en cada inyección con agua que se efectúa cada 15 ó 20 días para mantener húmedo el acodo, pones vitamina B1, mejor. 
Esta vitamina es un estimulante para el crecimiento de las raíces.

• En el caso del enraizamiento de esquejes y estacas se puede usar mezclada en el agua de riego, así como para favorecer el agarre de una planta trasplantada.

• La vitamina B1 se vende en farmacias como Benerva, en ampollas.

• Si es una especie que no es fácil de acodar es cuando tiene más interés aportar estas vitaminas que en otras que emiten fácilmente raíces.

Rooterpot

• Por último, mencionar brevemente un producto patentado para hacer acodos aéreos llamado Rooterpot.

 

• Consiste en una especie de maceta articulada con una bisagra que se abre y cierra. 
Tiene un depósito de agua y mantiene en su interior un microclima ideal para la generación de raíces. 
Es reutilizable entre 5 y 7 veces al menos y consigue altos porcentajes de enraizamiento.

Fernando Gatto

LA PICEA PARA BONSAI

Pícea (Picea ssp.) Otros nombres: picea, abeto rojo, pinabete, pino abeto, abeto falso, no confundir con el género Abies. El género Picea, ...