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Nunca deja de sorprenderme mi forma de entender o de recordar las cosas, muchas cosas que sé intuitivamente pero que no podría poner en palabras.
He trabajando duro por momentos en bonsái durante más de veinticinco años.
Eso en sí mismo es mucho tiempo, pero probablemente he pasado muchas más horas en esos años de las que la mayoría de la gente podría creer.
Tengo un poco de una naturaleza obsesiva que me permite concentrarme en algo con exclusión de todo lo demás.
Habiendo estado inmerso en mi propio pequeño mundo de cultivo de bonsáis durante tanto tiempo, ahora he aprendido algunas cosas.
Algunas de esas cosas podrían describirse como novedosas, revolucionarias o incluso vanguardistas.
Sin embargo, la modernización de muchas técnicas de cultivo de bonsáis está muy retrasada.
Todo está tan firmemente arraigado en la historia antigua que cualquier idea nueva, por simple que sea, puede ser interpretada por algunas personas como no válida.
Cuantas más cosas aprendes, más ves y cuanto más ves, más comienzas a darte cuenta de lo que está hay cosas mal en lo que hacemos, pero en su mayoría porque no tenemos la capacidad de interpretar una cultura milenar como la China o la Japonesa.
Creo que es hora de hacer las cosas por nosotros mismos y dejar de querer interpretar lo que no entendemos.
La palabra Kyomu es una palabra japonesa que, en su forma más simple, significa eterno apredíz.
La connotación principal es que la forma en que estamos trabajando actualmente es la peor solución.
¿NECESITAMOS SUELO ESTÉRIL PARA BONSÁI?
La sabiduría convencional apoyada por muchos expertos en bonsái establece que los árboles de bonsái deben plantarse en suelo estéril.
La sabiduría convencional apoyada por muchos expertos en bonsái establece que los árboles de bonsái deben plantarse en suelo estéril.
La razón es que el uso de suelo estéril evitará la entrada de plagas y enfermedades.
No es una idea irrazonable.
La noción, como con tantas otras cosas en el cultivo de bonsáis, proviene de la horticultura convencional.
Un medio de cultivo estéril tiene algunos usos en la horticultura, como la germinación de semillas, el corte de esquejes y algunas otras actividades técnicamente exigentes.
Sin embargo, los aspectos prácticos de esterilizar grandes volúmenes de medios de cultivo hacen que el uso de dicho producto sea una propuesta costosa.
El compostaje moderno puede esterilizar el suelo ya que la actividad bacteriana puede generar altas temperaturas.
Sin embargo, el principal beneficio es la destrucción de las semillas de malas hierbas.
Los centros de jardinería no quieren pasar mucho tiempo quitando las malas hierbas de las macetas.
Sin embargo, el medio de cultivo que utilizamos en el cultivo de bonsáis no es, por regla general, tierra.
Sin embargo, el medio de cultivo que utilizamos en el cultivo de bonsáis no es, por regla general, tierra.
Utilizamos una variedad de agregados naturales y manufacturados y productos orgánicos como corteza de pino, etc.
Muchos de estos se esterilizan fácilmente o se esterilizan como parte de los procesos de fabricación.
Entonces, hasta cierto punto, sería posible para nosotros usar un medio estéril.
Sin embargo, a menos que use agua esterilizada y mantenga la planta en un ambiente estéril, el suelo se contaminará tan pronto como entre en contacto con la atmósfera y el agua.
Entonces, la noción de suelo esterilizado es muy difícil de conseguir y prácticamente imposible de mantener.
Sin embargo, tengo que hacer la pregunta,
Sin embargo, tengo que hacer la pregunta,
- Es realmente necesario un suelo estéril?
- Existen beneficios significativos en el uso de un medio de este tipo?
- Cuáles son los posibles inconvenientes?
- Hay algún beneficio en no usar una mezcla de suelo estéril?
EL CÍRCULO DE LA VIDA EN LA TIERRA Y EN UNA MACETA
Tomemos como ejemplo los hongos.
La aparición de uno de ellos en una maceta de bonsái es suficiente para causar un infarto instantáneo en muchos cultivadores de bonsái.
Muchos cultivadores de bonsáis son conscientes de los hongos que viven en el suelo de los pinos, a menudo denominados micelio.
Sabemos que esto es una señal de que las cosas van bien, pero ¿por qué? ¿También deberíamos estar viendo esto con otras variedades de plantas?
Para que quede claro, una hifa es una estructura filamentosa larga y ramificada de un hongo.
En la mayoría de los hongos, las hifas son el principal modo de crecimiento vegetativo y se denominan colectivamente micelio.
La hifa se convierte en una red fina a través del material del que el organismo obtiene su nutrición, ya sea madera podrida o el sistema de raíces de su árbol bonsai.
La mayoría de estos organismos no son visibles excepto con el uso de un microscopio.
Un solo gramo de tierra de jardín puede contener un millón de hongos.
El tipo de hongo asociado a las especies de pinus es más tosco y abundante que algunos otros y así lo podemos ver.
Para producir un cuerpo fructífero, dos micelios de la misma especie se unen en el equivalente de una cita sexual.
Luego, dadas las condiciones adecuadas de nutrición, humedad, temperatura y luz, se forma un cuerpo fructífero.
Luego, con suficiente agua, se produce un hongo tal como lo conocemos.
Algunos hongos son parásitos y pueden causar daños o la muerte de sus huéspedes.
Sin embargo, aquí nos referimos a lo que comúnmente se llama Micorrizas, esos hongos que son capaces de vivir con las plantas, creando una relación beneficiosa para ambas, de myco que significa hongo y rhiza que significa raíz.
Los hongos son el tercer reino, Linnaeus, tan importante como los animales y las plantas.
Los hongos son una clasificación muy grande de organismos que tienen similitudes con las plantas pero carecen de clorofila y no pueden acumular los compuestos de carbono esenciales para la vida.
En su lugar, extraen su sustento ya preparado de plantas o animales vivos o muertos, exactamente de la misma manera que lo hacemos nosotros.
A medida que avanza el trabajo sobre la ecología de los hongos, comenzamos a darnos cuenta de que el mundo de las plantas depende increíblemente de los hongos en todos los sentidos de la palabra.
Los hongos descomponen las hojas, la madera muerta y los materiales orgánicos y aseguran que la superficie del mundo tenga una capa fértil de suelo.
Sin embargo, es a través de las relaciones íntimas entre los hongos y las raíces de los árboles y las plantas que se realiza la contribución más importante de los hongos.
Los árboles y los bosques viven en una relación simbiótica con una gran cantidad de hongos y, si no fuera por la ayuda que se brinda a las plantas a través de estas relaciones, muchas áreas boscosas simplemente dejarían de existir.
Los árboles y los bosques viven en una relación simbiótica con una gran cantidad de hongos y, si no fuera por la ayuda que se brinda a las plantas a través de estas relaciones, muchas áreas boscosas simplemente dejarían de existir.
De hecho, sin la tercera fuerza del mundo fúngico, la vida tal como la conocemos no sería posible, ni para las plantas ni para el reino animal que depende completamente de ellas.
Prácticamente todas las plantas desarrollan relaciones de micorrizas.
Se cree que solo alrededor del 5-10% de las plantas funcionan sin ayuda de hongos.
Se ha calculado que existen más de 7000 especies de hongos que forman relaciones micorríticas con un número similar de especies de plantas.
Dentro de esta simbiosis, el hongo recibe carbono de la planta y, a cambio, pasa fósforo, nitrógeno, zinc y un suministro de agua muy mejorado a su huésped.
Los suministros se pasan a través de las puntas de micorrizas a las raíces de las plantas.
Se ha calculado que se necesitan alrededor de ocho millones de puntas para formar un hongo pequeño.
La Nasa ha estado investigando los efectos de la simbiosis fúngica durante unos cincuenta años.
Llevó a cabo un experimento controlado a largo plazo plantando un par de pinos jóvenes, ambos de 1 metro de altura, en un suelo muy pobre: uno con un sistema radicular esterilizado, se plantó en suelo esterilizado.
El segundo estaba infectado con una de las especies de hongos Amanita y se plantó en suelo no esterilizado.
Ambas plantas fueron observadas y mantenidas en condiciones controladas durante unos 15 años.
Cuando concluyó el experimento, el espécimen estéril había crecido a poco más de 1,5 metros de altura: en cambio, el espécimen infectado había crecido a 8 metros de altura con un tronco de más de 35 cm de circunferencia.
Esto demuestra gráficamente el valor de la simbiosis fúngica.
Las relaciones fúngicas simbióticas pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte de las plantas y los árboles, particularmente aquellos plantados en condiciones menos que ideales.
También ten en cuenta que si las plantas fallan los hongos se van con ellas, ninguno sobrevivirá solo.
En el pasado antiguo, áreas como Escocia estaban predominantemente cubiertas por hermosos bosques, pero después de la deforestación fue imposible restaurar el hábitat a lo que alguna vez fue.
Cuando consideras por lo que tiene que pasar nuestro bonsái, ¿es de extrañar que tantos árboles se queden luchando?
Especulo que una vez que aprendamos más y prestemos atención a estos hechos, podremos mejorar drásticamente el crecimiento, la salud y el desarrollo de nuestros bonsáis.
Entonces, para resumir lo anterior.
Entonces, para resumir lo anterior.
Sabemos que las plantas son la base de toda la vida en la tierra porque toman agua, oxígeno y luz solar y crean carbohidratos que son utilizados como fuente de energía por otras formas de vida que no pueden realizar este ingenioso truco que llamamos fotosíntesis.
Los hongos no pueden producir su propia fuente de energía y obtienen lo que necesitan de las plantas.
Sin embargo, a diferencia de los humanos, no son codiciosos ni desconsiderados porque devuelven en igual medida.
En relación con el suelo en el que crece, el sistema de raíces de una planta es muy grueso y no demasiado eficiente para recolectar el agua y los nutrientes que requiere.
Sin embargo, los hongos son pequeños y eficientes para obtener lo mejor del suelo.
Sin embargo, quizás sorprendentemente para algunos, no hay bondad en el suelo, solo materias primas.
Para hacer uso de esos materiales se necesita una fábrica de productos químicos para convertirlos en algo útil.
Esta relación entre una planta y un hongo se llama simbiosis y ambos se benefician enormemente de ella.
Como podemos ver, los hongos son vitales para toda la vida en la tierra, entonces...
¿qué podría hacer que alguien pensara que el bonsái, o cualquier otra planta cultivada, debe mantenerse en un suelo estéril?
FAUNA Y BACTERIAS DEL SUELO
En este punto es importante considerar otro nivel de actividad dentro de un suelo saludable al que podríamos referirnos como fauna del suelo.
El suelo es una palabra que se usa de manera muy vaga, pero se refiere a la capa superior de la tierra en la que crecen las plantas, un material negro o marrón oscuro que generalmente consiste en una mezcla de restos orgánicos, arcilla y partículas de roca.
Por lo tanto, se requiere una mezcla compleja de elementos para crear algo que podemos llamar suelo, no es solo un medio de cultivo sino un ecosistema completo.
Como hemos visto, un elemento importante de un suelo equilibrado y saludable son los hongos que viven en él.
Sin embargo, para crear suelo en primer lugar y mantener su salud a largo plazo, necesitamos grandes volúmenes de material orgánico que finalmente se convierte en humus.
El material orgánico de las plantas y los animales cae a la superficie del suelo, lo que se conoce como interfaz suelo-hojas.
Aquí la actividad de los organismos del suelo descompone el material.
En aras de la simplicidad, considere estos niveles de actividad como un tamiz.
Los organismos más grandes (megafauna, mesofauna) descomponen los desechos que pasan progresivamente a los organismos más pequeños (macrofauna, microfauna) y así sucesivamente hasta llegar a los organismos unicelulares que llamamos bacterias.
Una vez que han terminado con el material disponemos de humus.
Esto se une atómicamente a las partículas agregadas dentro del suelo, dándole el color oscuro familiar y proporcionando una capa cargada negativamente que atrae y retiene los químicos necesarios para el crecimiento de las plantas.
Uff, complejo? Para nada es lo básico para la vida
Sin estos, la vida dentro del suelo es extremadamente difícil para las plantas.
Así que no todos los bichos y hongos son malos para nuestro bonsái, de hecho la mayoría son muy buenos.
Si podemos mantener nuestros árboles fuertes y en una condición natural saludable, serán resistentes a los avances de sus enemigos naturales, como los hongos rebeldes y los insectos masticadores.
Espero haber expuesto esto lo suficientemente claro como para que sea fácil ver que romper la cadena de eventos nos causará problemas dramáticos para tener éxito con el bonsái.
Evidentemente, es posible que necesitemos ajustar algunas de nuestras técnicas si queremos aprovechar esta situación y mantener las cosas en equilibrio.
MEDIOS DE CULTIVO MEJORADORES E INOCULANTES
Creo que todas las formas de vida en la tierra son sinónimos, un enredo interdependiente de fuerzas aparentemente no relacionadas que dependen completamente unas de otras.
MEDIOS DE CULTIVO MEJORADORES E INOCULANTES
Creo que todas las formas de vida en la tierra son sinónimos, un enredo interdependiente de fuerzas aparentemente no relacionadas que dependen completamente unas de otras.
Desafortunadamente, los humanos parecemos pensar que estamos por encima de todo y explotamos todo para nuestros propios fines y ejercemos un desprecio imprudente por todo excepto por nosotros mismos.
Una planta en una maceta es como un pez fuera del agua, una situación completamente antinatural que es estresante e insostenible a largo plazo.
Sin embargo, con un poco de habilidad podemos sacar lo mejor de un mal trabajo y mantener las cosas en marcha el tiempo suficiente para entretenernos y proteger nuestra inversión. Nunca será posible para nosotros replicar por completo un entorno de crecimiento natural para una planta en una maceta.
Sin embargo, la experiencia ha demostrado que podemos hacerlo bastante bien y deberíamos poder mantener nuestras plantas en una salud aceptable.
Ahora que somos, al menos, conscientes de la naturaleza compleja del suelo y la rizosfera, podemos tomar medidas para mejorar las posibilidades de vida de nuestras plantas seleccionando productos y materiales apropiados con los que construir su mundo.
Debido a que muchos de los medios de cultivo que usamos han tenido que ser procesados industrialmente, no contienen la variedad de vida que tendría un medio natural.
Eso no quiere decir que no soportará esa vida que, muy probablemente, encontrará su camino a su debido tiempo.
Sin embargo, en lugar de dejarlo al azar, a veces es posible que introduzcamos elementos beneficiosos de forma artificial en forma de mejoradores del suelo o inoculantes.
Un mejorador se define como una sustancia que ayuda al crecimiento de las plantas principalmente al mejorar la condición física del suelo.
Los inoculantes, a menudo llamados inoculantes microbianos, son enmiendas hortícolas que utilizan endófitos beneficiosos, microbios para promover la salud de las plantas.
En pocas palabras, un producto que agregamos al suelo para mejorar su capacidad de apoyar y promover el crecimiento de las plantas.
Los inoculantes de micorrizas suelen ser un vehículo inerte que contiene especies de hongos que favorecen la salud de las plantas.
Los inoculantes de micorrizas suelen ser un vehículo inerte que contiene especies de hongos que favorecen la salud de las plantas.
Hay una gran variedad de diferentes especies de hongos y un producto de calidad tendrá una gran variedad y ayuda si estos son nativos de su país y especies de árboles.
Agregar este producto a su mezcla en el momento del trasplante simplemente acelera el proceso de colonización de hongos.
No todos los hongos funcionan con todas las plantas y muchos hongos no son visibles a simple vista, a diferencia de los pinos, donde los hongos están muy a la vista.
En la mayoría de los suelos, simplemente no hay suficientes hongos micorrízicos nativos cerca de las raíces de las nuevas plantas para colonizar lo suficientemente rápido como para mostrar la increíble variedad de beneficios que puede lograr la colonización completa.
CULTIVAR PLANTAS EN MACETAS - ¿CUÁN DIFÍCIL PUEDE SER?
En lo que respecta al cultivo de plantas en macetas, me queda claro que es una de las áreas de la horticultura más complejas y difíciles de dominar.
En lo que respecta al cultivo de plantas en macetas, me queda claro que es una de las áreas de la horticultura más complejas y difíciles de dominar.
La razón principal para cultivar plantas en macetas es que puedan transportarse fácilmente para su uso o venta localizados.
Sin embargo, la mayoría de esas plantas están destinadas a tener una vida corta, se espera que muy pocas plantas en macetas producidas comercialmente permanezcan en sus macetas durante décadas, como es el caso del bonsái.
Entonces, tomamos lo más difícil de la horticultura, el cultivo de macetas, con plantas muy grandes y muy viejas y en macetas pequeñas y, peor aún, poco profundas, completamente inadecuadas.
A menudo cultivados por personas que tienen muy poca experiencia en horticultura y también se imaginan tener una inclinación artística.
Es un poco como darle a un niño una caja de fósforos y fuegos artificiales, solo puede salir terriblemente mal.
Entonces, ¿qué podemos hacer para aprovechar un fenómeno natural que está justo debajo de nuestros pies?
Obviamente, nuestra principal consideración es seleccionar un medio de cultivo que sea beneficioso para sustentar una rizosfera dinámica y biológicamente diversa.
Este es un trabajo complejo que requiere mucho conocimiento, comprensión y experiencia.
No es algo que el novato esté calificado para entender y ciertamente no es algo que deba dejarse al azar, que la gente agarre una bolsa de arena para gatos barata en un supermercado me deja sin palabras.
Ten respeto por tus propios esfuerzos artísticos pero ten mucho respeto por la vida de tus plantas.
¿Por qué tratarías así a tu preciado bonsái?
Nunca deja de sorprenderme por qué la gente del bonsái, algunos de los cuales tienen árboles muy caros, insisten en encontrar los medios de cultivo más baratos que puedan, es una economía falsa poner su árbol de 2000 dolares en arena para gatos porque es más barato que algo que puede producir resultados superiores.
Una buena tierra para bonsái tendrá un alto grado de bioactividad incorporada.
También tendrá la capacidad de retener nutrientes, mantener el drenaje y el pH, retener la humedad, evitar la acción capilar, tener la fuerza mecánica para sobrevivir durante largos períodos y proporcionar un espacio cada vez mayor para un sistema de raíces en desarrollo sin causar compresión.
También necesitará una estructura casi infinita de microporos en los que proporcionar un depósito de humedad y un punto de apoyo para todos esos adorables hongos y bacterias.
Además, no olvides que después de unos años tendrá que desmoronarse y soltar raíces sin daños cuando vuelvas a trasplantar tu bonsái.
Lamento decir que no hay un solo producto que haga todas estas cosas.
Incluso muchos productos tradicionales utilizados para el bonsái se quedan muy cortos, la arena hortícola e incluso Akadama solo dan resultados promedio en el mejor de los casos y pueden causar la muerte de las plantas en circunstancias menos que extremas.
Puedo decir honestamente que el medio más adecuado hoy en día son nuestras propias mezclas de suelo.
Estas que mejoramos y refinamos constantemente para brindar el mejor rendimiento general posible cultivando la más amplia gama de bonsáis.
Tal vez con el tiempo habrá un gran avance y todos pasaremos a usar otra cosa, pero por ahora eso ni siquiera está en el horizonte, si lo fuera, tendríamos árboles creciendo en él.
CONSIDERACIONES DE REPLANTADO
Habiendo obtenido nuestro medio de cultivo adecuado, es importante considerar cómo metemos nuestro bonsái en él.
Los mejores medios de cultivo del mundo serán de poca utilidad si el 80 % del cepellón de sus plantas es un ladrillo impenetrable de akadama viejo compactado o compost multiuso impenetrable.
Un bonsái vive en una cantidad muy pequeña de suelo y es importante que todo esté disponible para el desarrollo de las raíces, el suministro de humedad y nutrientes y la provisión de aire para las raíces en desarrollo.
Al trasplantar un bonsái, asegúrese de que el cepellón esté seco antes de comenzar, la tierra seca se desprende mucho más fácilmente que cuando está empapada y húmeda.
Nunca lave las raíces de un árbol, esto se llevará las semillas de una comunidad benéfica de colonias bioactivas que son vitales para el restablecimiento y la salud a largo plazo de la planta.
Si decide utilizar un producto para el crecimiento de raíces tenga en cuenta que se desperdiciará si está utilizando productos como piedras para gatos, arena, kiryu y similares.
Estos tipos de productos simplemente no tienen los mecanismos establecidos para soportar los hongos que contienen productos tan valiosos.
Después de trasplantar el bonsái, asegúrese de que la tierra esté completamente húmeda y trate de mantenerla así hasta que se reanude el crecimiento completo.
El suelo frío húmedo o anegado desalienta la bioactividad y retarda gravemente la curación y el posterior desarrollo de nueva masa de raíces.
MANTENIMIENTO A LARGO PLAZO Y FERTILIZANTES
Para mantener un suelo de bonsái bioactivo y una rizosfera saludable a largo plazo, se deben observar algunos puntos simples.
El factor más importante es utilizar siempre fertilizantes orgánicos de calidad.
Los fertilizantes químicos son demasiado agresivos para los bonsáis, funcionan muy bien para las plantas de crecimiento rápido como los tomates o las plantas de jardín, pero en mi opinión y experiencia deben evitarse para el uso de bonsáis.
Ya mencioné la fauna requerida para el desarrollo de una zona radicular sana y muchas de estas viven en lo que se llama la interfaz suelo-hojas, la superficie del suelo.
En un contexto de bonsái, esto es 1,5 cm. bajo del suelo, incluida el área desde aproximadamente la mitad de cualquier cubierta de musgo hasta la capa superior del medio de cultivo.
Esta variedad increíblemente diversa de organismos produce un servicio valioso al descomponer el material orgánico, incluidos los fertilizantes, para que puedan ser accedidos por bacterias que a su vez liberan nutrientes que las plantas y los hongos pueden absorber.
Mantenga los fertilizantes químicos fuera del bonsái en conjunto, no aportan nada a la mesa que no esté disponible en un producto orgánico de buena calidad como un producto muy recomendado para bonsái, y mézclelo para su uso.
Los fertilizantes orgánicos se fabrican combinando ingredientes ricos en nutrientes en una forma conveniente.
Estos requieren de la actividad de la fauna del suelo para liberarlos.
Esto a menudo da como resultado una capa de moho y algunos bichos espeluznantes que realizan su importante tarea.
En el caso de los gránulos de fertilizante, esto puede incluso resultar en la colonización por gusanos durante un corto período de tiempo.
Todos estos son indicadores maravillosos del hecho de que eligió un producto de buena calidad lleno de nutrientes y que está funcionando como debería.
Los fertilizantes solo deben usarse cuando la temperatura está constantemente por encima de los 12° C.
Por debajo de eso, cesa la mayor parte de la actividad de las raíces y la división celular e incluso si se lleva a cabo alguna actividad, no requerirá suplementos nutricionales dentro de un buen medio de cultivo.
La regla básica es 12° C durante 12 días antes de dar la primera alimentación.
Elija siempre un producto con una fuente múltiple de nutrientes.
Los productos como el estiércol de pollo son de una sola fuente y son fertilizantes muy pobres que contienen bajos niveles de nutrientes, a menudo en una banda muy estrecha y sin muchos microelementos vitales.
Un buen producto contendrá diversas fuentes de compuestos que contienen nutrientes, desde harina de huesos hasta algas marinas.
Así que un poco de olor, un poco de pelusa y algunos animalitos que se aprovechan de la generosidad es parte de la maravillosa bioactividad y diversidad que nuestros bonsáis necesitan tan desesperadamente.
PLAGUICIDAS DE SUELO
Solo un último punto a considerar y es el uso de pesticidas químicos diseñados para aplicación al suelo.
PLAGUICIDAS DE SUELO
Solo un último punto a considerar y es el uso de pesticidas químicos diseñados para aplicación al suelo.
Solo echa un vistazo a tu alrededor.
Nos venden productos todo el tiempo que en realidad hacen muy poco, si es que hacen algo, aparte de proporcionar un efecto placebo.
Todavía tengo que conocer a un cultivador de bonsáis que no se ponga verde enfermizo al ver un gorgojo de la vid.
Pero, pensemos en ello a la fría luz del día.
En realidad, es un pequeño escarabajo crujiente que no puede volar ni nadar y que madura a partir de una pequeña larva más pequeña que el gusano promedio.
Les encantan los sustratos a base de turba y compost multipropósito porque son fáciles de excavar y soportan una gran cantidad de crecimiento de raíces carnosas de las que se alimentan.
En la práctica, y suponiendo que esté utilizando un medio de calidad, es posible que encuentre uno o dos gorgojos al trasplantar, pero dado que no comen madera y solo viven en raíces carnosas y miden unos pocos milímetros...
¿cuánto daño pueden hacer?
Teniendo en cuenta que en el momento del trasplante, es posible que estemos podando más de la mitad del sistema de raíces, que es el menor de dos males.
La mejor línea de defensa es elegir una buena mezcla de suelo de bonsái desde el principio y pronto deambularán para encontrar cosechas más fáciles.
Realmente se debe evitar el uso de pesticidas de aplicación en el suelo a menos que tenga una infección más grave y persistente de algo como el pulgón de la raíz, pero incluso eso no causará problemas graves con plantas sanas y bien equilibradas.
Si podemos mantener una buena rizosfera sana y equilibrada, las plagas dañinas nunca aparecerán o se mantendrán bajo control por todo lo que sucede allí.
EN CONCLUSIÓN
En resumen, creo que de chicos nos enseñan a temer muchas cosas para mantenernos seguros.
Los hongos son malos, bueno, algunos lo son, pero muchos no lo son y proporcionan una buena comida.
También nos enseñan que las bacterias son malas, con la excepción de esos yogures que, a juzgar por el precio, deben contener alguna forma de vida extraterrestre de un planeta lejano.
También me hicieron creer que si huele mal, entonces debe ser malo, el queso azul también puede oler bastante mal, pero es sumamente rico.
Así que no todas las cosas malas son malas para todo y algunas cosas buenas son malas para otras cosas.
Necesitamos mantener nuestras ideas en contexto, no solo tomar técnicas extrañas de otras disciplinas, pensar estas cosas detenidamente, elimine las tonterías comerciales y desarrolle un camino a seguir que funcione, en este caso, para nuestros árboles bonsái.
Un árbol bonsái saludable es un árbol bonsái feliz y un árbol bonsái feliz es un propietario feliz.
Fernando Gatto
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