Hola Bonsaistas, hablando de especias conocidas, hoy traemos a tona al Cotoneaster, Cotoneaster spp., otros nombres: cotoneaster rupestre, cotoneaster de las rocas, griñolera horizontal, espina de pescado, guillomo.
El género Cotoneaster pertenece a la familia de las rosáceas y está representado por unas 50 especies de arbustos perennes, semiperennes y caducos distribuidos por Europa, norte de África, China, Siberia e Himalaya.
Su hábitat natural suelen ser las laderas pedregosas y roquedos de las montañas.
El cotoneaster es una especie poco utilizada en occidente, pero muy usada en latinoamérica.
El cotoneaster es una especie poco utilizada en occidente, pero muy usada en latinoamérica.
Es perfecta para diseñar como bonsái de pequeñas dimensiones, especialmente el Cotoneaster horizontalis, como por ejemplo un mame o un shohin, debido a la estructura de su ramificación fina y densa, así como al pequeño tamaño de sus hojas.
Además es un género poco exigente, duro y fácil de modelar, por lo que es muy recomendable para principiantes.
Algunas de las especies más conocidas de Cotoneaster, muchas de ellas cultivadas como bonsái, son:
Algunas de las especies más conocidas de Cotoneaster, muchas de ellas cultivadas como bonsái, son:
Cotoneaster adpressus.
Cotoneaster compacta.
Cotoneaster compacta nana.
Cotoneaster divaricatus.
Cotoneaster horizontalis Decn.
Cotoneaster horizontalis variegata
Cotoneaster hupehensis.
Cotoneaster melanotricha.
Cotoneaster rotundifolia.
Cotoneaster sternianus
Cotoneaster grantensis Boiss. = Cotoneaster racemiflorus auct.
Cotoneaster integerrimus Medik. = Mespilis cotoneaster L.
Cotoneaster tomentosus (Aiton) Lindl.
Cotoneaster adpressus Bois = Cotoneaster praecox auct.
Cotoneaster pannosus Franch.
Cotoneaster congestus Baker
Cotoneaster bullatus Bois.
Cotoneaster dammeri C. K. Schneid.
Cotoneaster franchettii Bois = Cotoneaster wardii auct.
Cotoneaster frigidus Lindl.
Cotoneaster buxifolius Lindl.
Cotoneaster integrifolius = Cotoneaster microphyllus auct..
Cotoneaster glaucophyllus Franch.
Cotoneaster salicifolia Franch.
Cotoneaster henryanus
otoneaster lacteus W. W. Sm.
Cotoneaster simonsii Baker.
Las principales características del cotoneaster son:
- Arbusto perenne, semiperenne o caduco, dependiendo de la especie, por ejemplo, el Cotoneaster horizontalis es de hoja caduca, aunque si el invierno no es muy frío puede comportarse como semiperenne.
Riego y Abono
- NO debemos abonar un árbol trasplantado, hay que esperar a que brote.
- NO debemos regar un árbol cultivado en el exterior después de una helada o cuando haya riesgo de heladas.
Trasplante
Una buena mezcla de sustrato para un cotoneaster podría ser una mezcla de tierra con un 50% de arena de grano grueso o material equivalente, 15% de turba y 35% de mantillo.
Alambrado
- Bacterias:
- Hongos: un problema muy frecuente suele ser el manchado de las hojas fúngico, el plateado de las hojas o la armilaria color de miel a causa de los hongos, generalmente acentuado si se cultiva en el interior debido a que la tierra se seca más lentamente.
- Serpeta:
Curiosidades
Las principales características del cotoneaster son:
- Arbusto perenne, semiperenne o caduco, dependiendo de la especie, por ejemplo, el Cotoneaster horizontalis es de hoja caduca, aunque si el invierno no es muy frío puede comportarse como semiperenne.
Posee una gran densidad de follaje debido a la corta longitud de sus ramas.
Su forma puede ser arbórea o de arbusto plano y rastrero.
- Tronco con la corteza grisácea.
- Tronco con la corteza grisácea.
Las ramas son rectas y finas.
En el caso del Cotoneaster horizontalis, con una estructura que recuerda a las raspas de los peces o a la de una espiga y que lo diferencia claramente del durillo, nombre común de un arbusto del género Viburnum, o del espino de fuego, del género Pyracantha.
- Hojas pequeñas, alternas, de color verde brillante y el envés pubescente, elípticas y dispuestas de forma muy apretada debido a la corta distancia que hay entre los nudos, y con una color otoñal muy bonito, que en el caso del Cotoneaster horizontalis es de tonos rojos y naranjas.
- Flores pequeñas de color blanco o ligeramente rosado, solitarias y axilares, como en el caso del Cotoneaster horizontalis, con 5 pétalos y pedúnculo muy corto, que aparecen en primavera y verano en las ramas del año anterior.
- Hojas pequeñas, alternas, de color verde brillante y el envés pubescente, elípticas y dispuestas de forma muy apretada debido a la corta distancia que hay entre los nudos, y con una color otoñal muy bonito, que en el caso del Cotoneaster horizontalis es de tonos rojos y naranjas.
- Flores pequeñas de color blanco o ligeramente rosado, solitarias y axilares, como en el caso del Cotoneaster horizontalis, con 5 pétalos y pedúnculo muy corto, que aparecen en primavera y verano en las ramas del año anterior.
En otras especies las flores y frutos aparecen en racimos, como en el caso del Cotoneaster frigidus o el Cotoneaster lacteus.
- Su fruto es una pequeña baya de color rojo o negro cuando está madura y que prácticamente cubre todas las ramas del arbusto en otoño.
Situación
- Su fruto es una pequeña baya de color rojo o negro cuando está madura y que prácticamente cubre todas las ramas del arbusto en otoño.
Situación
Si queremos una floración abundante, debe cultivarse en el exterior a pleno sol durante todo el año, pero evitando las exposiciones prolongadas durante la época más calurosa y especialmente después del trasplante, etapa durante la cual deberá situarse en un lugar muy bien iluminado pero sin sol directo para que pueda mantener las raíces con la tierra fresca.
En invierno debe protegerse del frío intenso y de las heladas fuertes, a pesar de lo cual necesita pasar el frío invernal para sentir el paso de las estaciones y permitir que la primavera le provoque el despertar de las yemas en reposo.
En invierno debe protegerse del frío intenso y de las heladas fuertes, a pesar de lo cual necesita pasar el frío invernal para sentir el paso de las estaciones y permitir que la primavera le provoque el despertar de las yemas en reposo.
Un invernadero frío en el exterior podría ser una buena solución para las zonas de inviernos más duros, procurando volverlo a situar en el exterior lo antes posible.
En ningún caso cultivarlo en el interior de casa.
Una vez encontrado su emplazamiento más adecuado, no conviene moverlo de sitio porque se resiente con los traslados, sobre todo si son frecuentes.
El cultivo exterior durante todo el año, además de garantizar su correcto cultivo, nos ayudará a que no aumente el tamaño de sus hojas.
Una vez encontrado su emplazamiento más adecuado, no conviene moverlo de sitio porque se resiente con los traslados, sobre todo si son frecuentes.
El cultivo exterior durante todo el año, además de garantizar su correcto cultivo, nos ayudará a que no aumente el tamaño de sus hojas.
Riego y Abono
Los riegos deben ser cada vez que se seque la superficie de la tierra, haciéndolo a fondo, es decir, hasta que salga abundante agua por los agujeros de drenaje, pero evitando tanto el encharcamiento permanente de la tierra, para evitar un exceso de humedad que pudra sus raíces.
No obstante, aunque tolera algún descuido con el riego y que la tierra se quede algo seca entre riego y riego, hay que tener en cuenta que el cotoneaster suele vivir en las zonas rocosas y montañosas, es decir, viven en sitios en los que nunca tienen las raíces totalmente secas, por lo hay que evitar que la tierra quede totalmente seca.
Aunque soportan bien la sequía cultivados en el jardín o en el huerto, acusan rápidamente la falta de humedad.
Conviene utilizar una regadera con agujeros lo más finos posible para que el agua penetre mejor en la tierra y lo haga con suavidad.
No hay que pulverizar las hojas ni mantener ambientes excesivamente húmedos de forma artificial porque correremos el riesgo de que aparezcan hongos.
No obstante, aunque tolera algún descuido con el riego y que la tierra se quede algo seca entre riego y riego, hay que tener en cuenta que el cotoneaster suele vivir en las zonas rocosas y montañosas, es decir, viven en sitios en los que nunca tienen las raíces totalmente secas, por lo hay que evitar que la tierra quede totalmente seca.
Aunque soportan bien la sequía cultivados en el jardín o en el huerto, acusan rápidamente la falta de humedad.
Conviene utilizar una regadera con agujeros lo más finos posible para que el agua penetre mejor en la tierra y lo haga con suavidad.
No hay que pulverizar las hojas ni mantener ambientes excesivamente húmedos de forma artificial porque correremos el riesgo de que aparezcan hongos.
En todo caso, si decides pulverizar, hazlo con mucha precaución y siempre que no te hayas olvidado de aplicar los correspondientes tratamientos fungicidas de primavera y otoño.
Nunca lo hagas con el árbol en floración ya que sus flores se marchitarán prematuramente.
Abonar con frecuencia con un abono orgánico de calidad, especialmente durante la época de crecimiento vigoroso, es decir, en primavera y también durante el otoño.
Abonar con frecuencia con un abono orgánico de calidad, especialmente durante la época de crecimiento vigoroso, es decir, en primavera y también durante el otoño.
Durante el invierno y la época más calurosa del verano debe reducirse la cantidad de abono porque son épocas con escaso o nulo crecimiento.
Podemos ayudar a reducir el tamaño de las hojas, además de con una buena exposición exterior a pleno sol con el suministro de abonos más ricos en fósforo y potasio que en nitrógeno para no fomentar el desarrollo de sus hojas, además así fomentamos la fructificación.
No olvidar que:
Podemos ayudar a reducir el tamaño de las hojas, además de con una buena exposición exterior a pleno sol con el suministro de abonos más ricos en fósforo y potasio que en nitrógeno para no fomentar el desarrollo de sus hojas, además así fomentamos la fructificación.
No olvidar que:
- NO debemos abonar un árbol trasplantado, hay que esperar a que brote.
- NO debemos regar un árbol cultivado en el exterior después de una helada o cuando haya riesgo de heladas.
Trasplante
Al final del invierno y comienzo de la primavera, cada 2 o 3 años, justo un poco antes de que comience la brotación del año.
Durante el trasplante conviene sanear bien cualquier parte de raíces podridas y podar las ramas no deseadas para reducir su copa.
Durante el trasplante conviene sanear bien cualquier parte de raíces podridas y podar las ramas no deseadas para reducir su copa.
No conviene podar demasiadas raíces, pero si la poda de raíces es muy fuerte, convendría quitar hojas en la misma proporción que las raíces eliminadas.
En caso de duda sobre la cantidad de raíces que tienes que podar, un truco seguro para no dañar el árbol es dejar 1/3 más volumen de raíces que de parte aérea.
Evita que se sequen las raíces en contacto con el aire durante el tiempo que dure el trasplante, evitando podar raíces a pleno sol o en un lugar con viento o corrientes de aire.
No es obligatorio, pero si utilizamos hormonas de enraizamiento con fungicida facilitaremos el éxito del trasplante al estimular el desarrollo de las raíces.
No es obligatorio, pero si utilizamos hormonas de enraizamiento con fungicida facilitaremos el éxito del trasplante al estimular el desarrollo de las raíces.
Debes ser lo más rápido posible durante el trasplante y evitar que las raíces se sequen por estar demasiado tiempo en contacto con el aire.
Una buena mezcla de sustrato para un cotoneaster podría ser una mezcla de tierra con un 50% de arena de grano grueso o material equivalente, 15% de turba y 35% de mantillo.
En todo caso, tiene que ser una mezcla con un excelente drenaje.
No hay que olvidar que la tierra utilizada debe ser siempre nueva y limpia y nunca reutilizada de otros cultivos para así evitar contaminaciones con hongos, enfermedades, plagas, etc. que hubieran podido afectar a otros árboles.
Hay que recordar que sus frutos son de color rojo e incluso posee alguna hoja verde si el invierno es suave y, por tanto, una maceta esmaltada que contraste con estos colores y de perfiles suaves, ovalada, circular, etc. puede ayudar a resaltar aún más su belleza, por ejemplo, con una maceta esmaltada azul.
Es conveniente proteger el árbol después del trasplante durante un par de meses, situándolo en un lugar muy bien iluminado pero evitando la exposición directa al sol.
Poda y Pinzado
No hay que olvidar que la tierra utilizada debe ser siempre nueva y limpia y nunca reutilizada de otros cultivos para así evitar contaminaciones con hongos, enfermedades, plagas, etc. que hubieran podido afectar a otros árboles.
Hay que recordar que sus frutos son de color rojo e incluso posee alguna hoja verde si el invierno es suave y, por tanto, una maceta esmaltada que contraste con estos colores y de perfiles suaves, ovalada, circular, etc. puede ayudar a resaltar aún más su belleza, por ejemplo, con una maceta esmaltada azul.
Es conveniente proteger el árbol después del trasplante durante un par de meses, situándolo en un lugar muy bien iluminado pero evitando la exposición directa al sol.
Poda y Pinzado
Se puede pinzar o podar durante todo el año para mantener el diseño y especialmente durante el verano para aclarar un poco la densidad con la que tiende a ramificar.
Lo habitual, si el árbol está sano, será podar de forma más intensa al final del invierno o comienzo de la primavera, evitando esta operación, si se prevén heladas.
Habrá que tener en cuenta que una poda fuerte reducirá el número de flores y frutos de la temporada siguiente. Normalmente las flores aparecerán a lo largo de las ramas del año anterior o en las que sean muy cortas de más de dos años. Después de una poda drástica, suele tardar en brotar.
No obstante podemos mantener una floración aceptable, si cada año sólo podamos drásticamente una parte del árbol y al siguiente el resto.
Habrá que tener en cuenta que una poda fuerte reducirá el número de flores y frutos de la temporada siguiente. Normalmente las flores aparecerán a lo largo de las ramas del año anterior o en las que sean muy cortas de más de dos años. Después de una poda drástica, suele tardar en brotar.
No obstante podemos mantener una floración aceptable, si cada año sólo podamos drásticamente una parte del árbol y al siguiente el resto.
Quizás en algún caso, sobre todo al comienzo del modelado de un árbol joven, tengamos que elegir entre rapidez en alcanzar su estilo y el disfrute de su floración y color de sus frutos.
Si solo deseas mantener su forma, deberás eliminar las ramas nuevas que nazcan hacia fuera.
La forma de emplear la poda como técnica de modelado es dejar crecer las ramas y podar en función de la dirección deseada asi sea izquierda o derecha.
Si solo deseas mantener su forma, deberás eliminar las ramas nuevas que nazcan hacia fuera.
La forma de emplear la poda como técnica de modelado es dejar crecer las ramas y podar en función de la dirección deseada asi sea izquierda o derecha.
El cotoneaster puede ser modelado casi en cualquier estilo debido a la flexibilidad de sus ramas, pero los más frecuentes son: hokidachi o escoba, kengai o cascada y cualquier estilo de árboles en o con piedras, aunque todo depende de tu imaginación y gustos.
Si pinzamos los nuevos brotes durante la época de crecimiento, especialmente en las zonas más congestionadas y dejando sólo los que vayamos a necesitar para su modelado, conseguiremos árboles más ramificados y compactos, con hojas aún más pequeñas.
Conviene eliminar las hojas y frutos marchitos para evitar la aparición de hongos, y las ramas no deseadas o secas pueden eliminarse en cualquier momento.
Si pinzamos los nuevos brotes durante la época de crecimiento, especialmente en las zonas más congestionadas y dejando sólo los que vayamos a necesitar para su modelado, conseguiremos árboles más ramificados y compactos, con hojas aún más pequeñas.
Conviene eliminar las hojas y frutos marchitos para evitar la aparición de hongos, y las ramas no deseadas o secas pueden eliminarse en cualquier momento.
Los brotes nuevos del año pueden pinzarse a 2 o 3 hojas durante el período vegetativo.
Nunca hay que podar drásticamente, si el árbol no está sano y vigoroso.
Además de podar para modelar, hay que podar para conseguir una estructura que permita la llegada de la luz a todas las ramas y las todas hojas puedan realizar la fotosíntesis.
Hay que tener cuidado de no podar drásticamente las raíces durante el trasplante, podando sólo las raíces más gruesas y dejando las más finas.
Nunca hay que podar drásticamente, si el árbol no está sano y vigoroso.
Además de podar para modelar, hay que podar para conseguir una estructura que permita la llegada de la luz a todas las ramas y las todas hojas puedan realizar la fotosíntesis.
Hay que tener cuidado de no podar drásticamente las raíces durante el trasplante, podando sólo las raíces más gruesas y dejando las más finas.
Las podas fuertes de raíces deben realizarse en el momento de los primeros trasplantes, con una poda equivalente de ramas.
Entre la poda de ramas y el trasplante o viceversa debería existir un intervalo mínimo de tiempo para no acumular demasiadas operaciones agresivas a la vez, por ejemplo, 3 semanas.
El cotoneaster posee una toxina, ácido cianhídrico, que puede ser venenosa para otras plantas, por lo que tras el uso de las herramientas, éstas deben ser limpiadas y lavadas.
Por último, recordar que la poda o el pinzado sólo se deben realizar si el árbol está sano.
Entre la poda de ramas y el trasplante o viceversa debería existir un intervalo mínimo de tiempo para no acumular demasiadas operaciones agresivas a la vez, por ejemplo, 3 semanas.
El cotoneaster posee una toxina, ácido cianhídrico, que puede ser venenosa para otras plantas, por lo que tras el uso de las herramientas, éstas deben ser limpiadas y lavadas.
Por último, recordar que la poda o el pinzado sólo se deben realizar si el árbol está sano.
Alambrado
Aunque muchas especies del género Cotoneaster tienen unas ramas bastante flexibles, el Cotoneaster horizontalis suele dificultar esta tarea porque las suyas son bastante rígidas y, por tanto, quebradizas, por lo que el modelado de esta especie es mejor realizarlo mediante una planificación de podas en años sucesivos.
En cualquier caso, si decidimos alambrar alguna rama joven, hay que vigilar las marcas del alambre en la corteza debido a la rapidez con la que engordan y crecen, pudiéndose alambrar en cualquier época, aunque siempre es preferible aprovechar alguna poda o el momento en el que las ramas están aún sin lignificar porque no están maduras.
En cualquier caso, si decidimos alambrar alguna rama joven, hay que vigilar las marcas del alambre en la corteza debido a la rapidez con la que engordan y crecen, pudiéndose alambrar en cualquier época, aunque siempre es preferible aprovechar alguna poda o el momento en el que las ramas están aún sin lignificar porque no están maduras.
No obstante el alambrado es preferible realizarlo durante el otoño, el invierno o la primavera antes de que se abran sus nuevos brotes, preferiblemente después de una poda, y sólo en árboles sanos, teniendo cuidado con la corteza del tronco y ramas.
Como hemos dicho, debes vigilar las marcas del alambre en la corteza debido a la rapidez con la que engordan y crecen, generalmente el alambre deberá retirarse en el momento en que vaya a comenzar la aparición de marcas en la corteza.
Como hemos dicho, debes vigilar las marcas del alambre en la corteza debido a la rapidez con la que engordan y crecen, generalmente el alambre deberá retirarse en el momento en que vaya a comenzar la aparición de marcas en la corteza.
Es recomendable no regar el día anterior al alambrado.
Enfermedades y plagas más frecuentes
Enfermedades y plagas más frecuentes
El cotoneaster es especialmente sensible a:
- Amarillamiento y caída de hojas:
- Amarillamiento y caída de hojas:
Debido a un exceso en caso de amarillamiento o por defecto de riego en el caso de caída, a un cambio repentino de temperatura y/o iluminación.
En el caso de las plantas debilitadas por falta de riego puede aparecer la fomopsis, que produce la muerte de los bordes de las hojas y más tarde de las puntas de los brotes laterales.
- Bacterias:
El tizón del cotoneaster, fuego bacteriano, etc. son enfermedades bacterianas que atacan a las flores y brotes nuevos, extendiéndose por toda la planta muy rápidamente.
Es característico un color negro o marrón rojizo en las zonas afectadas, como si se hubieran quemado.
El tiempo cálido y húmedo favorece su aparición y se propaga a través de las gotas de la lluvia y las herramientas de poda, penetrando a través de heridas o de las flores abiertas.
No se puede combatir de ninguna forma y la planta termina muriendo.
Debido a esto, lo más aconsejable es quemar los restos de la planta afectada y de las que hayan muerto, así como la limpieza y esterilización de las herramientas usadas para evitar el contagio a otros ejemplares.
No confundir estas enfermedades con un simple marchitamiento de las flores.
- Cochinilla:
- Cochinilla:
Insecto chupador de savia de forma plana.
- Hongos: un problema muy frecuente suele ser el manchado de las hojas fúngico, el plateado de las hojas o la armilaria color de miel a causa de los hongos, generalmente acentuado si se cultiva en el interior debido a que la tierra se seca más lentamente.
Este problema se soluciona fácilmente regando adecuadamente, es decir, dejando secar la superficie de la tierra entre riego y riego, y no pulverizando las hojas.
En el caso de detectar el problema, el tratamiento debe ser sistémico con un fungicida.
- Mosca blanca:
- Mosca blanca:
Insecto chupador de savia que suele concentrarse en el envés de as hojas nuevas y tiernas.
- Polilla del cotoneaster:
- Polilla del cotoneaster:
Suele atacar entre el final de la primavera y el final del verano. Las hojas se cubren de una maraña de hilos de una oruga de color marrón oscuro de la polilla Scythropia crataegella o de la Numonia suavella, que las vuelve marrones y acaban secándose.
Si el ataque es leve, con una poda es suficiente, pero si es muy fuerte, hay que usar bifentrín, metil-pirimifós o permetrín.
- Pulgón:
- Pulgón:
Como la cochinilla, es un insecto chupador de savia generalmente de color marrón o negro, de unos 3 mm de longitud y agrupado sobre los brotes tiernos y en colonias muy densas protegidas por hormigas que recogen el rocío meloso que secretan éstos.
- Serpeta:
Insecto chupador de la especie Lepidosaphes ulmi y recubierto de una escama marrón de unos 2 mm. y un aspecto parecido al del mejillón y vive pegado a los tallos viejos.
La forma de combatirlo es como en el caso de la cochinilla, especialmente con el uso de aceites de invierno y de verano o con malatión.
Por último recordar que los tratamientos deben ser específicos contra la plaga o enfermedad y constantes en el tiempo hasta eliminarla completamente y que el cultivo adecuado de nuestro árbol nos evitará tener que usar productos químicos que provocan:
Reproducción
Por último recordar que los tratamientos deben ser específicos contra la plaga o enfermedad y constantes en el tiempo hasta eliminarla completamente y que el cultivo adecuado de nuestro árbol nos evitará tener que usar productos químicos que provocan:
Reproducción
Es un arbusto que se reproduce con relativa facilidad a partir de:
- Semillas: para que germinen necesitan ser estratificadas previamente, es decir, mezcladas en arena húmeda dentro de una bolsa de plástico transparente y que se almacena en la nevera, en la zona de las verduras, durante todo el período invernal.
- Semillas: para que germinen necesitan ser estratificadas previamente, es decir, mezcladas en arena húmeda dentro de una bolsa de plástico transparente y que se almacena en la nevera, en la zona de las verduras, durante todo el período invernal.
El volumen de arena debe ser unas tres veces el de semillas.
Las semillas deben ser plantas en bandejas o pequeñas macetas tan pronto se observe que comienzan a germinar.
Otra forma es recoger los frutos maduros, lavarlos y plantarlos inmediatamente, de esta forman germinarán en la segunda primavera después de su siembra.
- Acodo aéreo:
- Acodo aéreo:
A principios de la primavera.
También se puede intentar un autoacodo, colocando alguna rama en contacto con la tierra del suelo.
- Esquejes, tiernos o juveniles, semimaduros:
- Esquejes, tiernos o juveniles, semimaduros:
Enraíza muy bien y prácticamente lo hace sólo con tocar el suelo, de hecho, suele autoacodarse de forma natural en el caso de que alguna rama toque el suelo de forma accidental.
Recogidos entre mediados y finales del verano, si son tiernos y de finales del verano al otoño, si son semimaduros, recogidos de ramas con abundante fruto y plantados directamente en macetas con arena, con algo de calor de fondo para acelerar el proceso.
La ventaja de este sistema es que se pueden obtener ejemplares exactamente iguales al original.
Si utilizamos hormonas de enraizamiento sobre los esquejes, obtendremos mejores resultados.
Curiosidades
El género Cotoneaster debe su nombre al sustantivo latín cotoneum = membrillero y al sufijo aster que señala un parecido imperfecto, en este caso al membrillero y suele ser común utilizarlo para denominar especies silvestres de plantas cultivadas por el hombre.
De hecho, muchas de las especies de este género podrían recordarnos vagamente a los membrilleros.
Fernando Gatto
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